Funk es un género musical, muy popular durante los años 1970, que apareció en los primeros años 60 en el ambiente nocturno de las comunidades afroamericanas e hispanas de Estados Unidos. Nacido como una evolución de algunos elementos del Soul y el Jazz anteriores aderezados por influencias latinas, el funk se consolidó como un estilo propio y marcó el camino de la música bailable de ahí en adelante.
Desde el funk, con la introducción de letras rapeadas y nuevos pasos de baile, nació el Hip Hop. Ambos estilos forman parte del Street Dance y se suelen enseñar conjuntamente.
En el hip hop y el funk se mezclan pasos del jazz, el break dance, los ritmos afro o la danza contemporánea. Los movimientos, muy coreografiados e intensos, son cortantes y expresivos, y se emplean sobre todo los brazos y el tronco, aunque también se trabajan todos los músculos del cuerpo. Se consigue un nivel de movimiento aeróbico importante. Su ritmo es muy marcado y rápido. Sus pasos exigen gran coordinación entre las distintas partes del cuerpo. Se utiliza también la expresión corporal como recurso expresivo típico de este tipo de danza.
Los bailes urbanos más populares son el Funky, Hip Hop, Breakdance, Breaking, Popping, House, Rocking, Bboying, Downrock, etc. Es frecuente ver a pandillas actuando en las calles de las principales ciudades del mundo mostrando sus habilidades en alguna de estas especialidades.